De toda la vida he sido consolero, cualquiera que me conozca lo suficiente sabrá que le he comido la polla a Sony en repetidas ocasiones, chupándole un poco la puntita nada más a Microsoft y practicándole una fellatio breve pero intensa a Nintendo de vez en cuando, ya que durante las Navidades pasadas me compré una 3DS XL (que está pillando polvo como una condenada la pobre en una esquina de mi escritorio, jugando muy ocasionalmente a Pokémon Oro porque soy un nostalgia fag de tres pares de escrotos) y finalmente he sucumbido ante los encantos de Nintendo Switch, que me mira con ojos golosos mientras escribo esto enseñando lo que tiene entre las patas (The Legend Of Zelda: Breath Of The Wild y Super Mario Odyssey, concretamente). Sin embargo, siempre había tenido el gusanillo de conseguir un buen ordenador, no los portátiles de mierda que había sufrido hasta este año y que no me corrían ni juegos con el motor Source sin ralentizaciones del copón o crasheando cada dos por tres.
Así pues, aquí empieza mi breve pero intensa aventura en el mundo del jodido PC y su suculenta sensualidad, intoxicante como el jager y dulce como el monster de los veinte Jagerbomb que me calzo cuando salgo de fiesta:
1.- El primer PC
Hace más o menos medio año le compré a un compañero de trabajo su antiguo PC "gaming" (esperad que voy al baño a vomitar) porque soy un manta en cuanto a componentes y me da extrema pereza ponerme a montar uno desde cero. No me costó mucho y no era gran cosa para el estándar de hoy en día pero con una GTX 660, 8 gigas de RAM y un i5 de gama media podía ir tirando para quitarme la espina que tenía desde hacía un tiempo: JUGAR AL JODIDO OVERWATCH (error, porque me ha consumido la vida y la cartera). Estaba feliz como una perdiz y poco a poco fui dejando de lado la PlebeyoStation 4, las pajas y demás consolas que había en mi habitación; siempre dicen que nunca se olvida el primer amor y vaya si es cierto. 2.- Los primeros periféricos
¡Coño, que hace falta un ratón y un teclado para usar un PC de sobremesa! Mi inocente yo de hace medio año pensaba que los periféricos de "gamer" eran una soplapollez como un piano y un gasto de dinero innecesario así que compré un teclado de veinte euros cutrón en un GAME con tres pares de lucecitas resultonas y seguí usando mi ratón de Logitech de cuatro euros que pillé en la cesta de la mugre de un MediaMarkt hace años. ¿Los auriculares? Unos de marca blanca que a día de hoy aún siguen funcionando y uso enchufándolos directamente a la tele para jugar a alguna consola cuando no tengo ganas de ordenador.Todo marchaba maravillosamente hasta que a finales de primavera comenzaron a abrirse lenta pero inexorablemente las puertas del Averno...
3.- Empieza el descenso al infierno
Aprovechando una "oferta" acabé comprando unos Razer Kraken Pro 7.1 y joder, vaya que sí se nota la diferencia. Cuando estoy jugando a PlayerUnknown's Battlegrounds puedo oír incluso si alguien se tira un pedo a mi alrededor, lo que me permite preparar emboscadas o quedarme quieto como un puto cagado rezando para que pasen de largo cuando tengo la mala suerte de caer en una zona donde a lo sumo he encontrado una sartén y un gorro de lana para mi personaje mientras el otro jugador que ha caído cerca lleva una escopeta, tres rifles de asalto, cuarenta chalecos antibalas, cascos y una BFG ya de paso. El desembolso total hasta el momento no era nada desdeñable pero era suficiente para ser considerado un set mínimamente decente; sin embargo, había despertado a la bestia y ésta no tardaría en cerrar sus fauces sobre mi cartera...
4.- El Kraken ha sido liberado
Todo ocurrió un fatídico día en el que vi un anuncio de la web VSGamers que ofrecía un PC con una GTX 1060 6GB, un i7 7700, 16GB de RAM y demás por poco más de 1000 euros, ya montado y listo para enviar. Cabe decir que lo tuve que pagar en dos meses, pasándolo realmente putas y casi rozando la prostitución para poder seguir pagando mis otros vicios y los gastos del día a día pero a la semana de pedirlo ya lo tenía en casa (que la historia de cómo tuve que perseguir al repartidor retraca de SEUR por Palma da para otro post) y joder, sí que se notaba la diferencia.En resumen, ya acumulaba casi 2.000 euros gastados en mi incursión al PC, dinero que podría haber aprovechado en dar una entrada para un coche nuevo (que me hace falta) o pagar algún curso que me permitiera cultivarme y tener más opciones de trabajo. Me dije a mí mismo "voy a aguantar esto hasta que explote, no me gasto más dinero ya" pero en el fondo, muy en el fondo, sabía que tan sólo me estaba autoengañando...
5.- Mi cuenta bancaria me implora que pare
El compañero de trabajo mencionado anteriormente es como yo o peor en cuanto a ver algo y comprarlo automáticamente, así que no puedo resistirse al comprar un teclado Razer nuevo con ratón en una oferta que vio por Amazon. "¿Quieres los míos?" me preguntó en el descanso del café, "No tienen ni un año, la garantía aún vale y están bien cuidados". En el fondo me dolía tener enganchado a mi pepino el teclado de plástico de GAME y el ratón de mierda, así que no dude en contestarle con un rotundo "SÍ JODER REVIÉNTAME EL CULO Y HAZME TUYO" sin preguntar siquiera cuánto quería por ambos artículos.Varios días después y con 120 euros menos me hallaba en casa con un Razer Blackwidow la mar de reshulón que tiene lucecitas y es mecánico, recio como una poronga erecta, y un ratón de Razer la mar de preciso y que también cuenta con lucecitas aparte de botones laterales para mayor comodidad a la hora de reventarle la puta cabeza cuerpo a cuerpo a la zorra de Widowmaker cuando la atrapo en la esquina de la que no se ha movido en toda la jodida partida y desde donde ha estado dando por culo de una forma pagana y atroz.
6.- ¿Qué augura el futuro para nuestra intrépida cuenta en números rojos?
Pues me quiero pillar un par de monitores decentes, para qué engañarnos. La tele que uso me la compré para poder jugar a PS4 a una calidad decente pero es tan patata a niveles de PC que los juegos en Ultra apenas se me ven distintos de cuando están en Medio, cosa que es INTOLERABLE. Más allá de eso, de momento, no creo que compre nada más hasta dentro de unos años, cuando sea necesario cambiar de equipo... o quizás haga lo de siempre y me arruine comprando mierda que no necesito pero que me hace quedar como puto amo que entiende del tema.¿A qué conclusión quiero llegar con este post fecal? Jugar en condiciones en PC es caro, sí, pero es probablemente la mejor decisión que he tomado en mi vida de jugón, a la larga sale mucho más rentable y te la cuelan mucho menos que en consola. Aparte de eso, la polla me ha crecido veinte metros, que nunca está de más.
Venga, compraos un maldito PC y, si eso, una consola de Nintendo que su mierda es imposible jugarla en otro sitio :V
P.D: Por favor, decidme que no soy el único al que le pasa esto que cuando hago cálculos de lo que me he gastado me dan ganas de pegarme un tiro